Trump, el nuevo principe

Es el error típico de los nuevos en política, creer que pueden cambiarlo todo en un viejo orden sin contar con las herramientas cohercitivas para balancear el poder a su favor evitando las lógicas traiciones de quienes dudan del nuevo orden de un príncipe nuevo que llego al poder sin los favores de la vieja oligarquía. 

Vieja oligarquía mundial que actuo en conjunto para librarse de este nuevo príncipe que se monto en  una potencia capas de patear el tablero del nuevo orden mundial ejecutado en estos momentos con estos estados de sitios sanitarios.

No hay probabilidad de cambios sino podes aplicar la fuerza para obligar a convencer a ese sector.

Ejemplo, pones un vice de la vieja política como pence y no lo tenés agarrado de los huevos en algo, como haces para asegurarte su lealtad en los álgidos momentos sino tenés la herramienta coercitiva adecuada para que el lo piense dos veces? decía maquiavelo que el daño que hagas a un hombre debe ser de tal magnitud que le imposibilite vengarse, así que la amenaza debe ser de esa magnitud,  o bien el negocio que le propongas para abrazar tu nuevo orden.

 Pero como decía otra vez maquiavelo, ante la imposibilidad de hacer el bien y ser temido, porque hay que ser león para espantar y zorro para encontrar, es siempre preferible ser temido, así que los viejos príncipes siempre podrán contar con las herramientas cohercitivas que obliguen a convencer a quien pretenda traicionar.

Trump entro a hacer política sin los km ni la experiencia para aventurarse en imponer un nuevo orden.

Y si en parte lo logro, destruyendo al viejo partido republicano para fundar un movimiento que interprete y conduzca el sentir de una enorme cantidad de americanos que rechazan la globalización que les exige perder sus trabajos y su pais, eso esta por verse en el proceso que acaba de empezar.