Antes de darles los enlaces del documental sobre los Illuminati realizada por (AIM) Australian Independent Media, una referencia sobre la mentalidad apocaliptica que impera en la cuspide de la casa blanca, Louis Casado nos decia:
¿Qué hacer contra un hombre que dispone de una línea directa con el Todopoderoso? ¿Que cree estar investido de una misión divina? ¿Que cree que el Apocalipsis está muy cerca? ¿Qué decir cuando ese hombre es el Presidente de los Estados Unidos? A fines del invierno 2003, algunas semanas antes de la guerra de Irak, George W. Bush intentó una vez más convencer al Presidente francés de sus argumentos, para que este admitiese que la causa era justa y la operación “Libertad para Irak” la voluntad de Dios. Ni más ni menos. En su demostración, Bush junior atacó los “Estados renegados”, estigmatizó el “eje del Mal”, evocó Gog y Magog. ¿Gog y Magog? Jacques Chirac se quedó lelo, sorprendido por la enigmática referencia. Un consejero del Eliseo, a quien le pidieron aclarar la cita rápidamente, terminó por encontrar la respuesta en la Federación Protestante de Francia. Allí le dijeron que al Fin de los Tiempos, según el profeta Ezequiel, Gog y Magog entrarían desde Babilonia en Israel. Ahora bien, Gog y Magog son la encarnación de las fuerzas del Mal, y Babilonia, que se sitúa cerca de Bagdad, fue restaurada por… ¡Saddam Hussein!
En verdad pocos saben que Bush junior es un activo militante de una secta de iluminados convencida de que Armaggedon, el fin del mundo, está próximo. Uno puede creer o no creer en dicha profecía, pero en el mundo real George W. Bush continúa haciendo lo posible para hacerla realidad.
El documental dividido en dos partes.
Parte 1 y Parte 2
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